Amigos.
"Caminas entremedio de mucha gente…, de repente aminoras tu marcha, te frenas, dudas, giras la cabeza y ves que al otro lado hay alguien igual que tú… y sin pensarlo demasiado esbozas una sonrisa que te viene devuelta…"
Soy fan de las amistades que llegan sin avisar para quedarse toda la vida.
Si, esas que comienzan con la hermosa casualidad de coincidir y por las que apuestas al todo.
Soy fan de las amistades que hacen del cariño un hecho y no un dicho.
De esas con las que no caben las máscaras y con las que las charlas son a corazón abierto.
Porque hay personas destinadas a encontrarse también en la amistad formando la combinación ideal de almas y momentos con la capacidad de curar por dentro.
Fan de los que llegan y se quedan a pesar de todo.
De los que no ponen excusas.
De los que están en las dificultades, de los que no te abandonan cuando tu mundo se derrumba y saben, que algunas veces no es necesario decir nada… ¡Solo estar!
De los que convierten un martes cualquiera en un sábado.
De los que sacan un mapa y preguntan ¿dónde?
De los que bailan, cantan y con un par de cervezas solucionan el mundo…
… y de los que lloran contigo a la vez que lo hacen con tus problemas.
Esos con los que creas recuerdos y grandes historias de pequeños momentos.
Super fan de los mensajes que te alegran el corazón mientras te roban sonrisas, recordándote así que estás haciendo las cosas bien.
Cada día me convenzo más de que todo, absolutamente todo, pasa por algo…, y si has conocido a alguien es porque tenía que pasar, para sumar o para restar, pero tenía que pasar.
No me creo la evidencia que anda diciendo por ahí que son necesarias tantas horas de conversación para determinar el grado de amistad, yo creo en las miradas, en los ojos y en la piel.
Tengo amistades que hice aquí y otras que traigo conmigo desde el otro lado del mundo...
Tengo amistades que llegaron hace años.
Tengo amistades que llegaron hace apenas unos meses.
Y he tenido amistades que como llegaron, se marcharon.
Bendita suerte la mía de haberos encontrado…, porque las mejores historias comienzan siendo nada y terminan siendo un todo…
¡Larga vida a los que un día se eligieron y lo harían mil veces más!