De mí para mí.
Hoy me dedico estas palabras.
Tengo un poquito más de medio siglo, exactamente he dado cincuenta y dos vueltas al sol.
Se podria decir que he vivido media vida cabeza arriba y media vida cabeza abajo.
Mitad en el hemisferio sur y mitad en el hemisferio norte.
He sido feliz, soy feliz y no descarto seguir siéndolo, pienso que la felicidad completa no existe, pero si lo hace sumando pequeños momentos.
De alguna manera todo suma, hasta lo que resta.
Creo firmemente que la vida nos devuelve parte de lo que damos.
Ya no me interesan las personas insustanciales. Dejo a un lado rumores y chismes, huyendo de malintencionadas opiniones que destruyen sueños, porque a pesar de los años nunca dejamos de soñar.
Hay puentes, escaleras, caminos…, abismos.
He caminado siempre intentando vislumbrar la meta…, pero no siempre hay meta, muchas veces llegas a un punto donde tienes que decidir y te obliga a cambiar, convirtiéndose el "adelante" en un interrogante…
He tomado muchas decisiones, algunas fáciles y otras no tanto, pero todas, equivocadas o no, han marcado mi vida para siempre.
Aprendí, aprendo y seguiré aprendiendo, como dice la estrofa de una canción "nunca se para de crecer, nunca se deja de morir…"
Aprendí que si quiero, puedo.
Aprendí que si respiro, el sentido no se pierde.
Aprendí que todo tiene su tiempo, que las cosas no siempre son como quiero.
Aprendí que puedo hacer lo que me dé la gana siempre que asuma las consecuencias.
Estoy aprendiendo a soltar lastre para hacer mi camino más ligero.
Estoy aprendiendo a perdonar y a perdonarme.
Y seguiré aprendiendo.
¿Qué aprenderé? … simplemente lo que hoy, primer día del resto de mis días, la vida…
….. me ponga por delante.