En línea...
La distancia se vuelve insignificante cuando el otro lo significa todo.
Dos palabras.
Dos palabras y un espacio entre ellas.
Dos palabras y siete letras.
Dos palabras, un espacio, siete letras y una tilde.
Cuantas veces leímos "en línea" y nos emocionamos sabiendo que esa persona está al otro lado.
Puede estar pegada a nosotros o a miles de kilómetros de distancia, pero está "en línea", está cerca, está tan solo al otro lado de una pantalla…
…casi casi al alcance de nuestra mano,
… y a total alcance de nuestro corazón.
Estar "en línea" también es una forma de "estar", de escuchar las letras y de acariciar las voces.
Es decirle al otro "aquí estoy" a pesar de la distancia.
Es igual, es lo mismo. Antes abríamos una carta, ahora abrimos una aplicación…
... con la misma ilusión, con las mismas ganas..., con los mismos miedos…
Porque todo se reduce a una espera, a un rostro que poco a poco va "sonriendo"
a medida que unas manos al otro lado lo hacen "escribiendo".
(le regalo una mirada de amor al océano frío de la tecnología).