Nostalgia.
No la mires donde hace daño.
Solo mírala en los rincones donde fuisteis felices,
donde no duele, y
donde solo haya cabida para el esbozo de una sonrisa.
No la mires donde hace daño.
Solo mírala, sin explicaciones, sin culpa.
Mírala tan de cerca que sean uno.
No la mires donde hace daño.
Mírala desnuda a tu lado una tarde de lluvia.
Mírala y mírate haciendo coincidir la complicidad para daros el encuentro en algún recoveco.
No la mires donde hace daño.
Mírala sentada a tu lado, mirándote ensimismada y perdiéndose en tu sonrisa.
Mírala haciéndose la despistada, mientras te observa de reojo, como espiándote...
Olvida el lugar donde hace daño y recuerda cada búsqueda incesante por encontrarla.
Olvida el lugar donde hace daño y revive es último beso acogidos por la bruma..., donde vuestros labios se encontraron otra vez y no pudieron más que rendirse ante el deseo.
Olvida el lugar donde hace daño, donde te desgastaste, donde se ancló la angustia, donde perdiste las ganas...
Ella ya no está.